Ritmoson- El retraso de más de una hora hizo que la gente empezara a abuchear y gritara al unísono "¡fraude!", pero al ingresar al escenario Shakira logró hipnotizar a esas 25 mil almas desesperadas por ver su actuación. Al aparecer en medio del público la máxima exponente del pop hispano, la gente decidió perdonarlo todo y no perder detalle de cuanto movimiento hacía la sudamericana, quien impregnó de energía y sensualidad cada uno de los temas que interpretó. Sin duda, la cantante dejó más que satisfecho a su público tapatío, al que logró cautivar con un espectáculo de primer nivel, que era lo menos que se esperaba de este icono de la música latina a nivel mundial. Ataviada con un llamativo vestido rosa con capucha, la artista caminó por un pasillo interpretando Pienso en ti y saludando a la gente que tenía a su alcance. Después subió una escalera para llegar al centro del escenario. Al interpretar su segundo tema, Shakira se despojó del vestido que la hizo lucir como un ángel para quedar con un pantalón negro entallado y una diminuta blusa dorada que resaltó su figura esbelta. Ya con el sexy atuendo, la cantautora empezó a ejecutar sus movimientos más sensuales al interpretar Años luz, Te dejo Madrid y Suerte, para luego saludar y agradecer la espera. Shakira subió al escenario a seis jovencitas para enseñarles los sensuales movimientos de cadera que la han caracterizado. Además, con guitarra en mano, interpretó "Inevitable", tema que dijo es uno de sus favoritos porque le recordaba sus inicios en Barranquilla, Colombia. La artista deleitó durante casi dos horas a miles de tapatíos con canciones como Nothing Else Matters, Gitana, La tortura, Ciega, sordomuda, Sale el Sol, Las de la intuición, Loca, Loba, Antes de las seis, Hips dont lie y Waka waka.
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