Sosa, había ingresado el miércoles pasado a terapia intensiva y desde entonces permaneció conectada a un respirador artificial por el agravamiento de una afección renal y una disfunción hepática que se extendió a los pulmones y el corazón. "A pedido de la familia vine a darle la unción de los enfermos", fue el último sacramento religioso que se dio a la negra.
En tanto, distintas cadenas de oración se venían sucediendo a pedido de su hijo, Fabián Matus, y se multiplicaron los rezos que pididieron por la salud de la gran cantante nacional. La presidenta chilena, Michelle Bachelet, se había sumado a las personalidades que mostraron su preocupación por la situación de salud que atraviesó la "Negra" y le envío "su cariño y admiración". El jueves, a pedido de la Presidenta, Cristina Fernández, el ministro de Salud de la Nación, Juan Manzur, se acercó a la clínica y ofreció toda la ayuda disponible a la familia.
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